la muestra, 4
romper la ventana | imagen cortesía de mariela álvarez
romper la ventana | imagen cortesía de guillermo boehler
romper la ventana | imagen cortesía de guillermo boehler
4. SOBRE COMO DERIVA Y ROMPER LA VENTANA ADOQUINAN EL CAMINO HACIA LA MUESTRA DE PINTURA EN EL ANTIGUO EDIFICIO DE INGENIERIA, SOBRE LA CUAL SE HABLARA EN LA QUINTA Y ULTIMA PARTE
PRIMER SEMESTRE 2018
empieza con un pequeño proyecto a principios de año,
“súper chiquitito”, “súper bebé”, es como lo describe viviana.
tres alumnos van a habitar un espacio dentro de la EAP durante unos meses.
es un pequeño espacio,
“un cuadrito pequeño”, es como lo describe viviana.
el proyecto se llama la prueba. participan pía chavarría, joseph fernández y walter gómez.
viviana y guillermo le presentan una propuesta a la asociación de estudiantes, el ente encargado de este espacio específico que quieren utilizar. la asociación da el visto bueno. para la ejecución del proyecto se asesoran con profesores.
en el pequeño cuadrito, viviana y guillermo ponen mesas, hacen reuniones, montan un espacio de trabajo en el que esos tres alumnos exploran sus procesos.
el espacio es importante. es al aire libre, público, siempre pasa gente. se ubica dentro de una plazoleta que marca el eje central de la EAP.
no están totalmente seguros, ni los organizadores ni los involucrados, de cómo va a ser la prueba, por ende el nombre.
navegan la relación público-privado. quieren que el espacio sea y se sienta público pero que también se evidencie que es un espacio de trabajo que se debe respetar. en un inicio ponen cintas de protección para delimitar la zona, luego las quitan pero en eso botan unos trabajos entonces las vuelven a poner.
los usos del espacio son variados. joseph fernández hace y vende salchichón, también hace calcomanías y las deja ahí a la par de un tarro de contribución voluntaria. los salchichones se venden, las calcas se empiezan a ver por la UCR, la plata de contribución voluntaria no se desaparece.
pía chavarría monta un pequeño estudio donde las personas pueden ver cómo ella hace sus pinturas. al espectador le permite ver y comprender la trayectoria que conlleva una de sus obras, a pía le permite exponer al público una parte de su proceso que suele realizar en privado, y exponerse ella al espectador durante un proceso que es normalmente muy íntimo.
con la prueba se estrena el proyecto Deriva, la plataforma formada por guillermo y viviana para experimentar con derivaciones que pueden ocurrir dentro de, y a partir de, procesos artísticos.
montaje de romper la ventana | imagen cortesía de mariela álvarez
espacio de ricardo fallas, romper la ventana | imagen cortesía de mariela álvarez
SEGUNDO SEMESTRE 2018
se viene el segundo semestre y con este la expo anual de la especialidad de pintura. normalmente esta expo muestra trabajos finales y es organizada por los profesores, pero para esta ocasión los profesores le preguntan a los alumnos que si se apuntan a organizarlo y 4 alumnos dicen que sí. los apuntados: mariela álvarez, guillermo boehler, glenn mora y viviana zúñigaramírez.
gracias a previas experiencias, estos 4 saben que no quieren hacer la usual exposición y saben que los demás alumnos también están buscando otros tipos de posibilidades para desarrollar, exponer y ver sus bretes.
esta expo siempre se realiza en los pasillos que rodean la plazoleta central de la EAP, un espacio limitado en el que no caben todos los alumnos, entonces para elegir a los participantes los apuntados organizan una convocatoria cuyo prerrequisito es asistir a varios conversatorios.
pía chavarría, participante de la prueba, señala que “la escuela de artes suele ser muy, muy, muy hermética. obviamente depende de los profesores y de la visión que tenga cada uno, pero rara vez se le anima al estudiante a salir de la escuela y a entender que el mundo de las artes no es un mundo hermético que está aislado y que trabaja solo para sí mismo”. es precisamente para romper con este hermetismo del que habla pía que los alumnos organizan los conversatorios. eligen 4 fechas, 3 temas distintos y, con ayuda de los profesores, invitan a 4 artistas “de afuera” para abarcar dichos temas desde su práctica.
los artistas invitados son javier calvo, christian salablanca, lola malavasi y adrián flores.
a esta exhibición/proyecto se le llama romper la ventana.
conversatorio con christian salablanca, romper la ventana | imagen cortesía de mariela álvarez
ROMPER LA VENTANA
romper la ventana tarda dos meses y participan 14 estudiantes.
es aquí donde vamos a introducir a diego gonzález, participante de romper la venta y personaje crucial de la muestra.
esta historia está basada en varias conversaciones, pero definitivamente el corazón del material es una conversación no planeada que tuve con diego, viviana y guillermo un día en diciembre del 2018. no planeaba mencionar dicha conversa hasta la quinta parte, pero a raíz de las preocupaciones de algunos lectores, aquí les va un pedacito:
recuerdo con mucha nitidez un momento específico de la conversación por lo que me reveló sobre la real relación de respeto y colaboración que se forjó entre -al menos- estos tres individuos a raíz de las experiencias que habían compartido hasta el momento. lo que sucedió fue sutil pero evidenció que entre estos tres existe una relación sólida, de esas donde no siempre las cosas son un jolgorio, no siempre se está de acuerdo en todo, pero sí siempre el rumbo, el norte o el fin es el mismo.
espacio de diego gonzález en romper la ventana | imagen cortesía del artista
espacio de jorge badilla en romper la ventana | imagen cortesía de diego gonzález
el momento ocurre tal vez porque después de escuchar un poco sobre la muestra mi cara es total confusión y estoy haciendo muchas preguntas que requieren medio-complejas respuestas, como: ¿pero cómo fue que llegaron acá? ¿como es eso de que no había espacio en la EAP?
por ahí creo que fue que ellos tres se percataron de que a juliette había que contarle toda, toda la historia, y así fue como guillermo empezó a mencionar Deriva, y ahí fue adonde diego interrumpió:
“¡uy yo quería decir esta parte!”
y yo me derretí. hasta este momento diego había sido el más serio, el más cauteloso, el más silencioso y el más intimidante, pero de repente con esa oración el semblante le cambió y no fue que perdió la seriedad pero sí dijo un billón de cosas lindas, elocuentes y esclarecedoras, como por ejemplo:
“yo pienso que este resultado en muy buena parte fue gracias a la experiencia adquirida por guillermo y viviana en dos dinámicas anteriores: en Deriva que fue a principios de año y romper la ventana que fue a finales del semestre pasado”.
a partir de ahí, entre los tres me explicaron lo que fue la prueba, lo que es Deriva, lo que fue romper la ventana.
porque esto aquí es más cuento que libro o reportaje, no voy a profundizar en todo lo que aconteció durante romper la ventana, pero con base en lo conversado digamos que se asoman 3 lecciones que tal vez pudieron haber quedado de la experiencia:
1) cómo negociar espacios de manera colectiva y desde contextos en los que el espacio en sí se ve impactado por distintas políticas:
este punto es clave. viviana, guillermo y diego subrayan el hecho de que estos procesos les enseñaron cómo trabajar de la mano con la escuela y con los estudiantes para obtener lo requerido: espacios, materiales, tiempo, permisos.
para diego, Deriva y romper la ventana le permitieron a viviana y a guillermo tantear “las aguas de qué tanto podían jalar la disponibilidad de la escuela, de los roles administrativos, qué tanto podían ocupar de esos recursos y qué tanto no se podía presionar”.
para los tres, de las cosas que más apreciaron fue ver cómo la escuela se involucraba hasta en momentos no planeados, como cuando la escuela puso unos paneles contra la pared para que no se dañara pero para que al mismo tiempo los estudiantes pudieran seguir trabajando. “son esos compromisos que uno va aprendiendo, de medir en qué si y en qué no nos podía ayudar la escuela, de conocer el lado administrativo que yo siento que mucha gente no trata de entender”, viviana.
espacio de danny nuñez | imagen cortesía de mariela álvarez
espacio de jose pablo araya | imagen cortesía de diana aguilar
2) interrogación y comprensión de procesos diversos y/o distintos:
para karina torres, una de las participantes de romper la ventana, la oportunidad de desarrollar su trabajo en un ambiente público pasó de ser una idea inicialmente intimidante a un ejercicio beneficioso para su trabajo, para ella y para los espectadores:
“romper la ventana se convirtió en mi cuarto, en la sala de mi casa, donde me llegaban a visitar amigos, personas desconocidas, inclusive era muy curioso como yo misma era parte de la “obra”, las personas se sentaban a verme pintar y realmente me hizo sentir diferente. ver yo misma de una manera objetiva mi proceso me hizo comprender lo importante que son estos espacios para los y las estudiantes de artes plásticas”.
espacio de karina torres, romper la ventana | imagen cortesía de mariela álvarez
karina torres en “romper la ventana” | imagen cortesía de la artista
3) la colectividad puede ser poder y bienestar:
en palabras de pía chavarría: “el 2018 fue un buen año porque sucedieron la prueba y romper la ventana. esos proyectos unieron mucho a los estudiantes, porque aunque estemos ahí en la escuela todo el día, todos los días, muchos tal vez nunca han visto realmente lo que hace la otra persona, o nunca han llegado y le han preguntado a otros cosas como, ¿qué es lo que le interesa? ¿por qué estudia artes? ¿por qué estudiamos artes?”
en palabras de diego gonzález: “más valioso que estar trabajando en ese espacio fue la oportunidad de participar en algo público, en algo que volvía íntima la producción de uno con la gente que pasaba.
además de eso me parecieron muy valiosos los conversatorios con los artistas, porque permitieron poner en discusión las prácticas, lo que uno realiza, lo que uno piensa, así como mostrar y ver lo que otra gente está realizando en esos momentos. el empaparse un poco y tener algo contra qué reaccionar, es decir, estar de acuerdo, estar en contra, o ver otra alternativa, o ir por el mismo camino, fue una retroalimentación muy provechosa que se dio con los invitados”.
para concluir y para que quede claro por qué para esta historia específica se considera que romper la ventana y deriva ayudaron a adoquinar el camino hacia la muestra colectiva de pintura, les dejo estas palabras también de diego gonzález:
“el resultado principal de romper la ventana fue levantar mucho los ánimos. la gente vio que había posibilidad de desarrollar proyectos, era nada más cuestión de ganas”.
espacios de andrés arias e isis redondo, romper la ventana | imagen cortesía de diana aguilar
espacio de isis redondo | imagen cortesía de diana aguilar
P.D.
estos son los 14 estudiantes que participaron en romper la ventana, síganlos, quiéranlos:
jorge badilla
ricardo fallas
jason fonseca
diego gonzález
danny nuñez
david piedra leitón
mari carmen prada
maría pía ortuño